Los juguetes deben ser seguros. En cuanto a la seguridad,
nuestros juguetes
cumplen todas las normas vigentes, son sometidos a pruebas por institutos de ensayo independientes y también se someten a intensos controles adicionales de calidad y seguridad con instrumentos de prueba en la sede de nuestra empresa en el norte de Alemania. Nuestros responsables de calidad acompañan a nuestros juguetes desde la idea, pasando por el muestreo y la entrega, hasta el punto de venta. 20.000 muestras aleatorias al año garantizan la seguridad de los juguetes que vendemos.
Además, nuestras
recomendaciones de edad
proporcionan una buena orientación sobre cuándo los niños pueden empezar a jugar de forma segura con un determinado juguete de manera adecuada a su edad. Como parte de estas pruebas aleatorias, las pinturas, lacas y materiales utilizados se someten periódicamente a pruebas de detección de sustancias nocivas (de acuerdo con la norma EN 71-3), y los artículos para niños de hasta 12 meses de edad también se someten a pruebas de resistencia a la saliva y a la transpiración (de acuerdo con la norma DIN 53160).
Parte de nuestra gama de productos lleva el
sello FSC®
(FSC®C138595). La madera utilizada para producir estos juguetes procede de bosques o plantaciones gestionados de forma sostenible que se inspeccionan y certifican de forma regular e independiente según Forest Steward Council (FSC)® y sus estrictas directrices internacionales.